Como Expulsar los Gases de tu Bebe Correctamente

Como Expulsar Los gases de tu bebe correctamente

Cuando nuestro bebé se retuerce, se siente incómodo y expulsa flatulencias constantemente, es probable que esté padeciendo de gases, este es un mal frecuente en los recién nacidos.

En su mayoría las personas tienen gases, pero los bebés suelen sufrirlos más, ya que su sistema digestivo está iniciando y no ha procesado bien su alimento principal; bien sea la leche materna o la de formula en sus primeros meses de vida.

Por tal motivo, es necesario conocer los factores que generan los gases al bebé y a su vez poder remediarlos, entre esos factores tenemos:

·       No sacar los gases después de las tomas; es necesario que el bebé eructe luego de haber ingerido su leche ya sea de pecho o del biberón.

·       Mantener una mala posición de succión; esto sucede cuando el bebé traga mucho aire, mientras está alimentándose, ya que no tiene la boca completamente cerrada en cuanto al torno del pezón o la tetina. 

·       Los cólicos; cuando un bebé los padece entran en una constante crisis de llanto, lo que permite que se llene más de gases y el problema sea mayor.

·       La intolerancia a la lactosa; algunos niños se les hace difícil tener una buena digestión a la lactosa, entre otros nutrientes que se encuentran en la leche de la fórmula, está va acompañada de retortijones y evacuación abundante.

·       APLV; normalmente ocurren casos en que los bebés son alérgicos a la proteína de la leche y eso les produce dificultades intestinales. Ahora bien, la madre en este caso evita la toma de lácteos si amamanta, y si se le da biberón se debe optar por fórmulas especiales.

·       Por otro lado, tenemos, que el consumo de alimentos sólidos, produce ciertos desórdenes alimenticios a parte de los gases, mientras que el bebé se acostumbra a su nueva dieta

 ¿Cómo diferenciar los gases, cólicos y los reflujos en el bebé?

Suele ser complicado poder distinguir si el bebé está sufriendo cólicos, reflujos gastroesofágicos, simples gases o las tres dolencias simultáneamente. Para conocer la diferencia entre ellas tenemos:

• ·       Los cólicos; normalmente en los primeros meses de vida, el bebé puede romper a llorar desconsoladamente durante varias horas o minutos. Si está situación se prolonga por 3 horas y durante tres días a la semana entonces estamos al frente de los molestosos cólicos, a los cuales no se le conoce ni el origen ni el remedio. Y lo más desesperante es que mientras el bebé llora, traga más aire y se llena más de gases. De modo que se tiene que tomar las medidas correspondientes para lidiar y aliviar dichos dolores.

• ·       Los reflujos gastroesofágicos; por lo general los bebés regurgitan posterior a las tomas de la leche materna o por el biberón, estos reflujos desaparecen a partir del año. No obstante, en ciertas ocasiones este reflujo va acompañado con síntomas que se confunden con gases. Si el bebé arquea la espalda mientras come o después de haber terminado, se siente irritado y no tiene mucho apetito, esta pasando por un reflujo que se conoce como gastroesofágico, si estos síntomas se hacen duraderos deben ser diagnosticado y tratados bajo prescripción médica.

• ·       Los gases; son aires que entran o son producidos dentro de nuestro cuerpo y que necesariamente tienen que ser expulsado, en el caso de los bebés los liberan mediante eructos y por flatulencia frecuentes.  Cuando el bebé tiene gases, no quiere comer, se retuerce y llora desesperadamente y luego de haberlos expulsado se calma, entonces esto quiere decir, que era motivo del malestar.

Prevención de los gases en el bebé

El hecho de que el bebé eructe o tenga flatulencia es normal y es indispensable para su correcta evolución. En ocasiones le entran más gases de lo esperado, y si lo expulsa en mínimas cantidades, 

puede surgir estas molestias por lo que es necesario tomar las siguientes medidas:

·       Colocar al bebé en una correcta postura para amamantarlo; él mismo debe tener la boca bien abierta para agarrarse del pecho, los labios tienen que estar hacia afuera mientras que la nariz y la barbilla tocan el pecho. El cuerpo tiene que estar estirado y debe dejar que succione tranquilamente para que vacíe el pecho por completo para luego pasar al otro.

·       Debes vigilar la tetina del biberón; cuando le des el biberón debes asegurarte de que el orificio de la tetina no sea tan pequeño ya que al bebé le cuesta succionar y va a tragar aire y si es demás de grande permite que succione demasiado rápido. Sin embargo, en el mercado puedes encontrar diversidad de biberones que están diseñados especialmente para reducir o evitar los gases.

·       Ayuda al bebé a expulsar los gases; cada vez que el bebé coma debe eructar, para ayudarlo se debe colocar sobre nuestra espalda y que apoye la barbilla al hombro, se le da palmaditas suaves con la mano en forma hueca, esta es la posición que más se usa para sacar los gases. Otra forma, es sentar al bebé en el regazo, con una mano lo sostenemos por delante y con la otra le damos palmaditas por la espalda. Otra alternativa es acostarlo boca abajo, se le levanta la cabeza para que le quede más alta que el pecho y también se le da palmaditas hasta lograr que expulse los gases.

·       Las tomas relajadas; es importante mencionar que el bebé tiene que comer tranquilamente, sin llantos, ni ansías, debe tragar con tranquilidad. Lo ideal es que coma a menudo si así lo desea, y no estar ligado con horarios estrictos para alimentarlo. Por otra parte, es conveniente mantenerlo erguido por un tiempo determinado después de comer.

·       Las bañeras anti-cólicas; tienen un diseño curricular y son altas, el bebé se mantiene erguido con las piernas dobladas, las mismas suelen ser útiles los primeros 5-6 meses y de esta manera prevenir los gases del recién nacido.

Siguiendo estos consejos, existe la posibilidad de que el bebé no sufra de gases frecuentemente, añadiendo que los mismos son normales, pero pueden prevenir la intensidad haciéndolos expulsar de manera rápida y eficiente.

De esta forma el bebé podrá tener más tranquilidad después de cada comida, y tener un sueño placentero.  

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